Carta para Teresa

Mami:

Sé que tal vez no leas esto, o bueno, si A te mete...obligada en la compu (ordenador) y te lo lee, lo verás. Ya sabes que tengo un blog, aunque no entiendas ni que es ni para que sirve.

No importa, da igual que no leas esto, ya te lo diré en persona, en breve...si todo sale bien.

Te escribo hoy esta carta para decirte muchas cosas. Casi todas las sabes porque te las digo muy a menudo.

Y esto lo aprendí cuando papá murió tan joven, con 45 años. Aprendí que las cosas hay que decirlas ahora, no dejarlas para mañana. El mañana, no existe y los sentimientos, hay que expresarlos hoy y siempre.

Yo por suerte, lo suelo hacer mucho, ya me conocés...soy muy cariñosa con vos y además, me río mucho con tus cosas y vos con las mías.

Y conste que cuando eras más joven eras un poco reacia a recibir cariño. Pero la edad nos hace más frágiles a todos, y vos y yo no somos excepciones. Y por suerte, siempre te digo, lo mucho que te quiero. Y vos también siempre me decís "te quiero hija, cuidate".

Los hijos a veces, no somos lo agradecidos que deberíamos ser con nuestros padres.

Pero supongo que es parte de la juventud, época en la que la muerte no existe, cuando nos comemos el mundo o cuando nos creemos dueños de el.

Pero yo soy una mujer y vos, tenés 78 años. Y no sé cuanto tiempo más podré abrazarte, decirte que te quiero, reírnos juntas cuando nos vemos, o bailar en navidad, rodeada de la familia, moviendo nuestras caderas al ritmo de lo que nos pongan, tango, cumbias, salsa..o lo que sea.

De ti he heredado muchas cosas. Físicamente, soy igualita a vos bueno, eso me decís cuando me ves "...tenés el mismo cuerpo que yo a tu edad".

De cara, de forma de ser y de andares, según vos me parezco más a papá. Cuando me decís "...sos igual a papá cuando te reís y tenés su mismo caminar". Eso me gusta.

Me gusta tener cosas de los dos.

Pero lo que más me gusta, es ser una mujer fuerte, valiente y eso, te lo debo a vos.

Por eso, si hay algo que agradezco sobre todas las cosas, es que vos seas mi mamá.

Siempre fuiste una mujer luchadora. Desde que tenías 10 años y ayudabas en el campo a tus padres.

Aprendiste a leer y a escribir, por voluntad propia más que por haber hecho todos los cursos del colegio. Porque en tu infancia, había que trabajar desde niños en algunas zonas del país.

Te fuiste de tu Mendoza natal con 18 años a vivir tu vida en Buenos Aires, a la capital, a la gran ciudad.

Ahí, comenzaste tu vida sola, en los años 50...que no son los años de ahora.

Te casaste con alguien a quien amabas apasionadamente, pero el, no estaba muy preparado para ser un "hombre casado y responsable de esa elección".

Pero entiendo perfectamente que te hayas enamorado de papá. Era guapo, seductor, mujeriego, y apasionado. Como podías haber evitado caer en las redes de ese galán indomable que bailaba tan bien el tango y las milongas, que tanto te gustan. Que pareja de baile más bonita hacían!.

Te separaste joven cuando yo tenía un año y mi hermana 5. Te pusiste a trabajar en una fábrica y allí estuviste la mayor parte de tu vida. Te levantabas a las 5 de la mañana y volvías a casa a las 10 de la noche.

Por eso, he sido independiente desde muy chiquita. Y pese a que en algún momento...sentí que me faltó algo, hoy sé que he vivido la vida que nos ha tocado vivir. Y rescato lo mejor de esa época.

Hoy soy una mujer adulta, y vos estás muy orgullosa de mi y yo, de vos.

Me decís siempre que soy generosa, valiente, buena y que pienso más en los demás que en mi misma. Pero si yo soy algo bueno en esta vida, es gracias a vos.

Si volviera a nacer, querría tener a la misma mamá. No quisiera ninguna otra, ni siquiera quisiera tener otra infancia, ni otra adolescencia, porque he llegado a la madurez, con fortaleza porque he aprendido de vos.

No hemos tenido una vida familiar "normal" como tienen muchos, pero hemos estado juntas hasta que yo, decidí partir a vivir otra vida lejos de casa.

Sé que esto te ha hecho muy infeliz, que me extrañas, pero también, que con la generosidad que sólo las madres tienen, nunca me has dicho VUELVE que te necesito. Sólo has dicho CUANDO QUIERAS VOLVER.... ESTA ES TU CASA. Y lo sé.

Por eso mami hoy quiero decirte que no sé cuanto más estarás con nosotros, soy realista y sé que no nos queda mucho por compartir juntas. Pero eso no importa, vos sabes que yo creo que donde vayas, cuando sea tu momento, allí me esperarás.

Siempre te digo "...no te mueras sin avisarme...dame tiempo a que coja un avión y pueda darte un beso de despedida".

Y vos te reís y me decís...QUE YO NO ME QUIERO MORIR TODAVÍA DESGRACIADA. Y hasta con este tema, nos reímos. Pero yo lo digo, en broma pero lleva parte de certeza, tengo pánico a que mueras y que yo, no pueda darte un beso de despedida. Por eso siempre pido...dame tiempo para llegar.

Pero si eso no pasara, por la distancia, por la vida que he elegido...no me quedaré con ninguna cosa pendiente con vos. Te quiero, te querré y siempre estaré orgullosa de vos. Y te lo digo a menudo.

Has sufrido mucho en tu vida, pero yo te aseguro que has sido una buena madre, eres una excelente abuela y eres la persona que me ha hecho quien soy.

Gracias mami por ser mi mamá.

Feliz día mami. Te amo!. Y si todo sale bien...en breve te voy a ver.

Aunque ya me conozco el panorama...llegaré al aeropuerto y te pondrás a llorar. Y yo te diré como siempre: "mamita no llores...que estoy acá". Y vos me dirás "sí...pero te irás pronto".

Entonces te diré lo de siempre... "pero ahora estoy con vos!".

Feliz día de la madre. Gracias por todo lo que me has dado con tanto esfuerzo.

Y feliz día para todas las madres argentinas porque hoy, es su día oficial. Aunque ya sabemos que todas las mamás deberían ser valoradas y respetadas cada día de nuestra vida.

Un beso a mi mamá y a todas las mamás.