Viaje: Capítulo Final "Incidencias de serie"

Para poder llegar al norte tuve que, obviamente...preparar el viaje.

Me costó encontrar el billete de avión idóneo y desoí los consejos de Circe...de ir en tren. Paso de estar 4 horas en algún lugar, si puedo estar 50 minutos.

Como toda persona educada, compré regalos argentinos para llevar a Carlota y a Circe.

Para Carlota era un bote de dulce leche y una lata con dulce de batata...con dulce de leche también.

Y para Circe, alfajores.

En cuanto a equipaje, sólo llevaba mi maleta de mano...con sus correspondientes rueditas porque no quería facturar equipaje. Y mi bolso bandolera que me resulta práctico a la vez que moderno. Y además combinaba perfectamente con mi chaqueta.

La noche anterior, y como soy muy ordenada, preparé todo y cerré la maleta.

Al día siguiente, sólo tuve que guardar el cepillo de dientes...taxi y al aeropuerto.

Llegué y fui directa a hacer el check in y por suerte, fue rápido gracias a las máquinas AUTOCHECK IN . En ellas, todo lo haces tú. Pones tus datos, colocas tu tarjeta de Iberia Plus si la tienes, eliges el asiento y sale tu tarjeta de embarque.

Estas máquinas son estupendas porque te evitan hacer colas insoportables.

Y como yo no tengo paciencia para hacer colas...me autocheckiné:-).

Con la tarjeta de embarque en la mano, me acerqué para pasar por el control.

Conocido ya el protocolo ridículo de seguridad que tienen los aeropuertos después del 11 S (menuda tontería...deberían haberlo hecho antes ahora...no sirve de nada)... me quité el cinturón, saqué el móvil, me quité las pulseras y todo lo que se supone...pitará...al pasar por el "arco de control".

Y esperé mi turno. Mi atuendo era unos Levi´s, una camisa blanca, unas sandalias blancas de cuña, y mi cinturón. Este dato aunque no lo parezca...es importante!.

Me toca pasar a mi y entonces pongo la maleta sobre la cinta y cojo la bandeja de plástico que tienen apiladas por allí...para colocar mis cosillas.

En ese instante una señora desde el otro lado (no del más allá no...del otro lado del arco de control) me dice "..tiene que quitarse los zapatos!".

Iba a hacer grrrr...pero me dije...venga relájate...estas de vacaciones!.

Por lo tanto, no protesto...me dan unas bolsas de plástico que simulan calzado o algo así. Me los pongo en los pies y dejo mis sandalias en la bandeja y meto todo en la cinta. Y me quedo esperando.

Pasan unos minutos -había un señor que pitaba por el arco... más que nada y lo hicieron pasar 4 veces- y ya entonces, con los pies fríos...me quejo.

Le digo a los que estaban controlando...que se den prisa que yo...estaba casi descalza.

A punto estaba yo de pasar por el arco cuando veo pasar a una chica con sandalias como las mías y le pregunto a la mujer "controladora": "oiga porque ella puede pasar calzada y yo no?". Sí lo confieso, soy una acusica pero me ponen nerviosa la falta de criterio de los seres humanos.

La mujer "controladora" me responde " su cuña* tiene 3 centímetros menos que la suya". (* cuña/plataforma).

La miré con cara de asco y pensé "..quien es esta? la mujer biónica?...como mide desde lejos la altura de las cuñas si llevo unos vaqueros que me tapan las cuñas...?.

Pero bueno, dije no me voy a cabrear...porque no es plan.

En cuanto atravieso el arco, me pongo mi cinturón, las pulseras, las sandalias y la mujer me dice "...tiene que abrir la maleta".

Y yo pienso...joer que pesadita que está esta tía!.

Pero digo " por supuesto..." y seguía tomando aire para no mandarla a tomar por saco. Yo seguía haciendo control mental y diciéndome "estas de vacaciones - estás de vacaciones - estás de vacaciones -".

A punto de abrir mi maleta la mujer me pregunta "...lleva un bote* de mermelada?" (*bote/frasco).

Contesto: "no, llevo un bote de dulce de leche".

La muy torpe, coge mi bote de dulce de leche con guantes de látex como si fuera plutonio Made in Argentina y me dice "...esto no puede pasarlo".

Y pensé...ah no...con el dulce de leche...no se juega!!!.

Y comenzó un dialogo surrealista.

Yo le pregunto que porque? Si NO es líquido.

Y la tonta pone cara de eso, de tonta y dice "...NO SE PUEDEN PASAR LÍQUIDOS".

Le digo "...no me ha escuchado?. Le he dicho que esto no es un líquido!. Es sólido...que no lo ve?" Grrrr.

Ella agrega "lo siento pero tengo que destruirlo!".

Pregunto "...que harás le darás un susto al bote o saltarás encima para que explote?. O tal vez le vas a dar con un rayo láser???". Ya estas alturas...yo estaba de muy mala hostia.

La mujer no se ríe. Yo tampoco.

Le explico que no es líquido ...que es dulce, que es una crema, y me cabreo y le digo que no me da la gana dejar el bote porque a ella le parezca. Pido hablar con la Guardia Civil.

La mujer se va y llama a un Guardia Civil.

Aparece uno más tonto que ella pero vestido de verde...era de la Guardia Civil pero de la división de los tontos del culo.

Joven...contento de tener algún tipo de poder sobre mi dulce de leche me dice "no se pueden pasar líquidos".

Y pienso (vuelta a empezar) le contesto "que ya lo sé...que conozco las normas de seguridad del aeropuerto, que viajo bastante y por eso le digo que esto...no es líquido!".

Se pone unos guantes de látex el GCTDC (Guardia Civil Tonto del Culo) y creyéndose Grissom del C.S.I. intenta leer la etiqueta del Dulce de Leche.

Le explico que ese dulce ha pasado 3 aeropuertos y que en ninguno ha tenido problemas.

De pronto...y cuando consigue leer la etiqueta dice con ímpetu...como si hubiera descubierto la fórmula de la Coca Cola "...350 Grs...no puede pasar, tiene que destruirse". Pensé...ala otro gilipollas.

Tenía ya, a estas alturas un cabreo...que me estaba acordando yo de la Madre Patria al completo.

Observando la situación había un grupo de empresarios de mediana edad, con traje, elegantes, pijos...mirándome.

Los muy graciosos tenían una leve sonrisa en sus afeitadas caritas y...pensé...estoy yo ahora como para reírle las gracias a los guaperas estos!.

Seguía yo discutiendo con la mujer sobre la forma de exterminio de mi bote de Dulce de Leche.

Le dije "...si lo vas a destruir hazlo delante mio porque no tengo ganas que mañana os toméis unas tostaditas con MI dulce de leche".

Y me dice "no se preocupe... ahora verá como se destruye".

Y la mujer, al más puro estilo Súper Agente 86...coge el bote....da 10 pasos y tira mi dulce de leche dentro de un contenedor.

Contenedor de los que todos conocemos que tiene un agujero y que perfectamente se puede abrir. Eso...hasta donde yo puedo entender no es "destruir" nada, es ponerle en un contenedor y punto pelota.

Y la tía se queda tan ancha...nunca le ha venido mejor un apodo a una persona que a esta...esta era " la tonta del bote".

Yo a estas alturas estaba indignada.

Murmuré antes de dejar la zona de discusión varias cosas...que no tenían criterio...que con la lata de dulce de batata que llevaba para Carlota podía asesinar a un ser humano y hasta dos, porque pesaba lo suyo. En cambio...eso se puede pasar y no un mísero bote con dulce de leche, etc.etc. etc.

Histérica, seguí mi camino. Pasé rumiando insultos delante de los tíos estos...que no estaban mal por cierto...que me seguían mirando y en esta ocasión, además...me sonríen los 4 juntitos.

Y yo pensé...joer que bien me ha quedado el pelo hoy...estoy que me salgo!.

Sigo caminando y todos los hombres y mujeres que venían de frente a mi...me miraban y dije vale...que pasa aquí?. Vale que hoy puedo estar más guapa que lo normal pero esto...va más allá.

Me miro desde los pies hasta el pecho....que es donde un humano puede mirarse, siempre y cuando no sea la niña del Exorcista...y digo JODER!.

Tenía 4 de los 5 botones de la camisa desabrochados. Por ende, la camisa estaba abierta.

Digamos que discutí, caminé y me pavonee durante 10 minutos por el aeropuerto... mostrando el sujetador.

La maldita bandolera se ve que de tanto movimiento me iba desabrochando los botones y yo...estaba mostrando mi delantera.

Me paré...me arreglé la camisa y me empecé a reír. Pensé...que manera de hacer el ridículo!.

Pero mi sujetador era muy bonito y yo estaba monísima y contenta por irme de viaje. Así me reí y pensé...cuando yo cuente esto...!.

Ahora entiendo la cara de mala uva de la parte femenina de las parejas que se cruzaban por mi camino. Ellos me miraban...ellas también, pero la cara de ellas no era de buen rollo...la de ellos sí.

Y pensé porque a nadie se le ocurre decirme...oye que se te ha abierto la camisa?.

Pero bueno, no sentí vergüenza mas bien me sentí ridícula discutiendo seriamente sobre...que tipo de arma letal teníamos que inventar para destruir MI dulce de leche y todo esto...en sujetador.

Bueno...que le vamos a hacer...una, que es así de ridícula.

Y anoche recordé esto viendo el telediario. A partir de no sé cuando hay nueva normativa que entre otras cosas dicen que no te pueden hacer quitar los zapatos ni los cinturones antes de pasar por el arco. Y si pitas, entonces comienzas a quitarte cosas, pero antes NO.

Una pena que la nueva normativa... no diga nada de MI Dulce de Leche!