miércoles, 10 de octubre de 2007

Hacia adelante...o hacia atrás???????


Mientras más avanzo, más ganas de retroceder tengo.

Despúes del cumple del domingo de mi amiga, he estado dándole vueltas a "lo que fue".

Seguramente debe ser, insisto una vez más, por la cercanía de mi cumple.

Siento algo así como, mientras más voy "hacia adelante" más deseo tengo de "volver hacia atrás". Y a que vuelvo? Supongo que a buscar dulces o divertidos recuerdos para apaciguar la maraña de elementos externos que invanden y pertuban mi cabeza.

Esto debe estar provocado por esa famosa frase "uno vuelve siempre a los lugares donde fue feliz...". Y creo que esto significa no sólo un lugar geográfico, sino a recuerdos, historias, vivencias.

De chica siempre fui diferente y por eso, no me extraña que ahora sea como soy. No sé si eso era bueno o malo, pero era diferente.

Mis vecinas jugaban con muñecas y con niñas, yo jugaba o sola o con niños lo que me llevó a creer que jugar a las "chapas" o a las "bolitas" era algo normal para una niña.

Traducción simultánea:
* Chapas: darle a una figurita con la palma abierta para que se de vuelta.
* Bolitas: impulsar con el dedo pulgar a una para desplazar las otras.
Creo que esto de tener doble nacionalidad me está afectando...

Además, me daba como más energía el ganarle a los hombres (aquí debí decir niños...pero ha sido un famoso "acto fallido" supongo). Yo era más lista que ellos y ellos, rabiosos, se ponían colorados por el esfuerzo en intentar ganarme.

Sobre las muñecas tengo pocos recuerdos. Sólo recuerdo una, que hablaba y decía gilipolleces y era una enfermera (eso habrá condicionado mi necesidad desbocada de ser profesional de "algo"). Pero el que me ha acompañado hasta el psícologo incluso, ha sido mi muñeco, un bebé.

El pobre no tenía nombre, bueno, sí, pero tenía tantos que no tenía fin. Por eso, yo lo llamaba, mi muñeco. Me gustaba tanto (supongo que ahí estaba manifestando el incipiente sentido de la maternidad) que no lo dejaba ni a sol ni a sombra.

Lo más raro es que permanentemente, le escribía en la nuca un nombre, el de alguien que yo quisiera o que me habría aportado algo y creo recordar que tenía como cinco o seis nombres.

Sufrió -y yo con él- un cambio de look radical porque era pelirrojo y con pelo corto, pero yo consideré un día (de esos que luego traté con el psicólogo de turno) que tenía que ser diferente. Entonces lo rapé, esperando que muy pronto, tuviera otro tipo y color de pelo. Y claro, no fue así. Por lo que mi muñeco se quedó con 3 minipelos y seguía pelirrojo.

El pelirrojo era de tela, con vestido de bebé creo que transparente. Digo creo porque no me hagan mucho caso, pero creo que mi vieja, todavía lo tiene y le hace vestidos.

Esto significa que la locura, es hereditaria. O tal que vez que, en la vejez uno recupera la infancia perdida o se invente, la que no tuvo.

Digamos que durante mi infancia, fui arrastrando a un pobre calvo, pelirrojo, con un traje transparente color celeste y medio descabezado como compañero de viaje. Y como he dicho antes y no es broma, a los veinti tantos...fue conmigo a terapia. Demosle entonces una gran importancia a este muñeco, que sigo sin recordar que "apodo" tenía...pero ya lo recordaré.

El único recuerdo de niña/femenina eran las figuritas. Y las que más me gustaban eran las de vestiditos con texturas, terciopelo, tela, o lo que fuera, pero me fascinaban los vestidos de reinas...con su suave tacto, con sus colores. Era genial.

Pero ya sabemos que los previos siempre son los mejores en casi todo, y recuerdo con gran emoción no sólo el momento de tener un nueva figurita en mis manos sino el instante en que ya sabía que iba a tener un sobre con nuevas figuritas.

La idea de abrir el sobre, sacar la figurita, ver si LA TENGO O NO, pegarlas en el álbun, abrirlo y volver a abrirlo era fantástico.

Creo que ese el comienzo del tan denostado éxtasis del que los adultos solemos hablar (el que tiene la suerte de tenerlo) cada tanto.

Y porque cuento todo esto? Pues porque hoy me encontré con mis queridas "figuritas".

Será que ya he hecho una nueva elección en mi vida adulta y definitivamente, abandono de mis recuerdos a mi gran muñeco en aras de las tan queridas figuritas con terciopelo?

O la pintura de la terraza (ya casi no queda andamio en el edificio...) me ha afectado por su componente "el silicato" o algo parecido es lo suficientemente tóxico como para que yo, cuente estas cosas?

Cualquiera que sea el motivo hoy, no tengo un día gris. Y el sol por supuesto sigue invadiendo Madrid y los güiris siguen en chanclas.

Y no lo tengo (gris) porque desde ayer, me he dado un descanso al tema de buscar soluciones para todo.

No enloqueceré porque no puedo resolver en la actualidad mis proyectos, porque si no enloquecí teniendo un compañero de infancia/adolescencia calvo, pelirrojo, y plurinominal no lo voy a hacer ahora no?.

Pues nada, voy a volver a aspirar un poco de la pintura ocre Nº85 según el pintor, a ver si mañana, hablo de los supersónicos, hijitus, el súper ratón...entre otros.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bien saber saber que hoy tu día no fue gris. Sobre todo porque a veces, removiendo recuerdo las cosas se tiñen si no de gris, de sepia, como las fotos de los abuelos.

Tu muñeco al que tenías que cambiar, los nombres, los hombres, son todas cosas que he ido conociendo en este tiempo que te conozco y me sorprende, kiri, cuánto te conocés vos misma. Y cuando descanso te negás a veces (que yo sé por qué).

Me gusta leerte aunque no siempre comente ¿te lo dije ya?

:-)

Ivana Carina dijo...

Creo que los momentos felices, casi siempre nos llevan para atrás, al menos los míos.
Y siii, tal vez la pintura te afectó, herrmanna... jajajajaa
Y acordate que los años no vienen solos... y que mientras más viejas nos ponemos, los recuerdos nos recuerdan (valga la redundancia) que estamos viejaaaasss... jejejej, chisteeee
Cariños ¿desde el fondo del mar?, no ché, de la Patagonia no más :)
Ivana.-

Carlota dijo...

¿Te llamas kiri? Jo, es que se echa de menos dirigirse a tí con un nombre que no sea tan largo como másdificil.... y si no, dinos uno para llamarte así, ok? ¿Qué son las figuritas? Es que la foto parece lo que yo llamo recortables, pero nunca los pegué en un album...¿? Explícanos, por favor. Un saludo.

Anónimo dijo...

lo mejor estas 200 lineas de texto es q hoy no tienes el dia gris, sino pelirrojo!!!! no sabes lo qme alegro q la pintura q ponga contenta.
bss

Kiri dijo...

A ver...organización :-).

dosdedos: amiga querida, ya sé que me lees y que me escuchás y esto último es de...medalla de honor! Para vos por supuesto.Gracias una vez más.

Ivana: Tenés razón los años vienen y habrá que reflotar el tema de la experiencia y todo eso no?. Recordar: jamás useís una pintura al silicato...ya veís los efectos que produce.

Carlota: mi amiga dosdedos me dice kiri (como mi gata del alma) porque se supone que ese es mi nick o como se llame esto que te identifica en el blog. Pero sólo a ella le sale el kiridido en su blog a vosotras creo que no no? Tengo todavía un poco de lio con esto pero ella vendrá pronto a casa a organizarme. Y me llamo Cristina. Las figuritas son los cromos coleccionables, pero los trajes eran con texturas. Si tenías un cromo de una reina, el traje era de terciopelo y tocarlos era súper bonito. Y el álbun pues era muy gordo...porque no eran cosas planas...se entendió?:-)

Maravilla guapa: yo también me alegro, como vérás soy muy fácil de contentar jejej!

Ivana Carina dijo...

Como siempre, a Carlota había que explicarle todo! jaja!!

Y tu nombre es de Reina, no como o-trasss...